Quién iba a decir que la vida iba a unir nuestros caminos, fue todo tan inesperado o quizás casualidad, pero, ¿Sabes qué? Fue la mejor casualidad que he tenido en mi vida, una casualidad que hizo que mi mundo girara 180 grados.
La cuestión es esperar, he aprendido que todos nacemos con un objetivo, pero sobre todo, que estaremos destinados a estar con esa persona que te cuide, te quiera, te haga feliz, esa persona que jamás permitirá que te sientas sol@, la que te dará su confianza plena, con la que viviréis muchísimos momentos llenando vuestras mentes de recuerdos, dulces recuerdos.
¿Y el objetivo? Ser feliz, cumplir todos vuestros sueños, porque los sueños están para cumplirlos, no permitamos que quede en un simple sueño. Pero claro, que mejor que acompañad@ de esa persona especial que tanto te llena el alma, sol@ llegarás antes, pero acompañad@ llegarás más lejos. Y entonces al final del camino, te darás cuenta que estás con la persona indicada, esa que tanto te complementa, te entiende, te apoya...
Cuando os abrazáis sentís como vuestros corazones laten al mismo tiempo. Es tanto la conexión entre ambos, que si a uno de los dos le pasa algo, el otro tiene una sensación extraña, no puedes irte sin despedirte porque sientes como si te faltara algo. Si, la vida os ha unido y es por algo y, ¿Sabes qué? Agradece a ese algo, porque te ha puesto en tu camino a la persona perfecta para continuar el resto de vuestras vidas juntos y te aseguro que jamás te faltará esa felicidad que tanto habías añorado.
"Estaban enamorados. Se notaba por la forma en que se miraron entre sí... como si tuvieran el secreto más maravilloso del mundo entre ellos"
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